Las precipitaciones y las
suaves temperaturas que se están registrando son condiciones favorables
al desarrollo de Mildiu y Botritis. Por otro lado,
si la intensidad de las precipitaciones no se incrementa, también el
Oidio puede verse favorecido (las lluvias más fuertes
provocan lavado del micelio). Ante esta situación, es aconsejable la
aplicación de un tratamiento contra estas patologías tan
pronto como las condiciones climáticas se tornen favorables, sobre todo
si ya ha concluido el período de cubrición de los productos
utilizados en el anterior tratamiento y si no se va a confirmar, mediante
seguimiento, la aparición de nuevos síntomas de estas
enfermedades.
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